MOTIVACIÓN DE LOS DIRECTORES

Para mí (Alex Lora), la idea de hacer esta película surgió hace varios años cuando me mudé a Nueva York. Estaba viendo montañas de bolsas de basura apiladas en las calles, y gente que recogía las latas y botellas. Pensé que había una gran contradicción. Comencé a investigar sobre el plástico y los métodos de reciclaje, seguí a algunos “canners” y hice un teaser con algunas grabaciones antiguas, pero abandoné el proyecto hasta que conocí a Adán.
Para mí (Adán Aliaga), la idea surgió cuando comencé a colaborar con Sure We Can, un centro de reciclaje sin ánimo de lucro en Nueva York que es además una comunidad de “canners” y un centro de sostenibilidad. Un lugar donde las latas y las botellas de plástico se cambian por monedas, y donde los desechos orgánicos se reciclan para crear compost. Hablé con Alex y compartí algunas imágenes, él me mostró el teaser que hizo y descubrimos que teníamos muchos puntos de vista en común.
Comenzamos a colaborar juntos con la idea de hacer una película y durante este proceso, también hicimos un corto documental. El trabajo tan inspirador del centro de reciclae y las personas que conocimos allí, nos animaron a observar más de cerca las dinámicas de éste lugar tan particular.
Ana Martínez de Luco, la ex directora de Sure We Can, también es española, y ese fue un importante punto de partida para el arranque de este proyecto. Conocimos a Ana y comenzamos a colaborar con ella durante unos meses, ofreciéndonos voluntarios para ayudar a su proyecto de recaudar $ 3 millones de dólares para comprar el terreno sobre el que se asienta Sure We Can. Mientras filmamos algunas piezas de vídeo para mostrar el trabajo que SWC está haciendo y su impacto en la vida de tantas personas, comenzamos a sentir más curiosidad por este lugar especial, nuestro “Cuarto Reino”. Así es como denominamos el espacio, un entorno mágico, pero también en referencia al reino de los plásticos creado por los hombres, que se suma a los tres reinos naturales: animal, vegetal y mineral.
La gente del “Cuarto Reino” transforma la basura en una fuente de ingresos que les permite vivir e integrarse en la sociedad, para evitar ser marginados. Con esta película, también quisimos abordar otro punto de vista sobre lo que llamamos “progreso” en nuestra sociedad moderna. Los plásticos cambiaron nuestras vidas y nuestro mundo. El desperdicio, la contaminación, el reciclaje … son nuevas realidades, efectos secundarios de esa evolución, la otra cara del sueño del progreso. En el “Cuarto Reino”, los desechos orgánicos y no orgánicos de nuestra sociedad consumista, se convierten en los sueños de cientos de personas, sus sueños de progreso, su particular “Sueño Americano”, la mayoría de ellos inmigrantes, que luchan por una vida mejor.